La piedra angular del B2E, mucho más que información
Son muchos los que definen el B2E, del inglés Business to Employee, como una estrategia relacional de gestión de las relaciones internas entre la empresa y sus empleados, refiriéndose al marketing interno de gestión. El B2E deriva del B2C (Business to Consumer), pero a diferencia de este los clientes finales (los particulares) son los propios empleados, los cuales cuentan con unas ventajas comerciales y un trato justificado por la relación laboral existente: la relación empresa-empleado.
Lo cierto es que el B2E surge debido a la necesidad de atraer y retener personal cualificado en un mercado competitivo, concretamente a raíz de la necesidad de contar con trabajadores especializados en IT (Tecnologías de la información). El término en sí nace de la digitalización pero a día de hoy se ha generalizado, englobando todas aquellas acciones y tácticas de reclutamiento así como las estrategias de empoderamiento de los empleados. En definitiva, son todas aquellas acciones desarrolladas dentro de los equipos de trabajo donde el foco del negocio es el empleado.
Disponer de B2E es sinónimo de cultura de personas. Este tipo de cultura aporta valor a la empresa y se consolida como una clara ventaja competitiva sostenible en el tiempo. Pero, ¿qué buscan las empresas con esto? La compañía busca desarrollar en los empleados una mentalidad productiva y crear emprendimiento e innovación horizontal, para atraer y retener personal cualificado en un mercado competitivo.
Cuando nos preguntamos dónde se sustenta es cuando entra el papel de la piedra angular, la pieza clave del B2E: el “portal”. El término “portal” es el término complementario de la intranet, pero ¿por qué complementario”? Porque, de forma estricta, aunque el enfoque de la intranet es la organización, el foco del portal es el individuo. Dicho portal está enfocado en el empleado, en sus deseos y su satisfacción personal. Es una red de ordenadores privados que facilita los procesos de comunicación y ofrece productos y servicios a sus empleados, todo ello a través de procesos online y gestión de personas. No se trata de un simple directorio corporativo o información de soporte al cliente, sino de cualquier información personal, ventajas, gamificación, formación y cualquier vínculo que el empleado pueda desear.
Es, por tanto, necesario optimizar el uso y la gestión de la información, combinada con diferentes programas de incentivación y demás tipos de recompensas. Son los “portales B2E” los que se dedican a ello, los que incrementan el nivel de satisfacción del empleado, reducen los costes y mejoran su eficiencia.
Las características del portal dependerán en gran medida de la tipología de empresa, del sector al que pertenezca la misma y/o de la tipología de empleados. Aun así, cabe destacar seis características distintivas, y necesarias.
- Altamente personalizado para adaptarse a la imagen corporativa, a la filosofía de la compañía y a la estrategia en general.
- Fácilmente modificable para adaptarse al empleado en particular. El contenido del portal debe segmentarse por perfil de empleado. La segmentación juega un papel importantísimo.
- Diseño simple e información accesible para facilitar y agilizar la navegación en el mismo.
- Una única forma de acceder, a través de una URL y de un login personal.
- Disponer de apartados (noticias, vacaciones, opciones e-commerce, comunicaciones y gaming…).
- Posibilidad de ser medio principal donde desarrollar el trabajo.
Como conclusión, enumeraremos algunas de las ventajas de disponer de dicho portal:
- Generador de comercio electrónico interno.
- Potenciador de la fidelización y de la implicación profesional del empleado. Los empleados se alinean a la estrategia de marketing de la empresa y se genera compromiso.
- Estimula la adaptación del nuevo profesional a la empresa.
- Perfeccionamiento de los procesos internos y mayor calidad de la comunicación interna.
- Agilización de las actividades burocráticas.
- Sistema de unión entre la organización y los componentes definidos por el empleado.